Rumpl no empezó en un garaje como otras startups legendarias. No, su origen es mucho más frío.
Imagina a los fundadores, Wylie Robinson y Nick Polinko, dos amigos amantes del aire libre, en un viaje de surf y esquí en California.
Todo iba bien hasta que se quedaron atrapados en su coche debido a problemas con su coche, sin acceso a ningún refugio cercano y con temperaturas bajas. Y aquí es donde entra en juego la creatividad.
En lugar de desesperarse, decidieron usar sus sacos de dormir para mantenerse calientes, y se dieron cuenta de algo: ¿por qué las mantas no podían ser tan eficientes y cómodas como un buen saco de dormir?
Fue en ese momento donde nació la semilla de Rumpl. Los sacos de dormir les dieron una calidez y comodidad enorme, y pensaron: ¿por qué no diseñar una manta que ofrezca lo mismo, pero que puedas usar tanto en el sofá de tu casa como en una montaña a 2000 metros de altura?
Lo que distingue a Rumpl desde el principio es su enfoque en los materiales técnicos. Mientras la mayoría de las mantas tradicionales usan textiles comunes, Rumpl optó por los mismos materiales que se utilizan para fabricar sacos de dormir y ropa técnica de exteriores. Así nació la primera manta técnica de la marca: ligera, resistente, impermeable y, lo más importante, increíblemente cómoda.
Pero la innovación no solo queda ahí. Desde el principio, Wylie y Nick se enfocaron en crear productos versátiles.
Ya no se trataba solo de hacer una manta para el salón de tu casa. Rumpl era la respuesta para quienes querían una manta funcional, que pudieras llevar de camping, a una excursión o cualquier sitio. Todo con el mismo nivel de comodidad y estilo.
Una vez que la idea de Rumpl estaba sobre la mesa, los fundadores decidieron llevarla a Kickstarter, como otros muchos productos que os hemos enseñado.
El apoyo fue inmediato, y lograron superar con creces su meta inicial de recaudación. Esto no solo les permitió lanzar su primera colección de mantas.
Gracias a este impulso inicial, Rumpl comenzó a ganar reconocimiento rápidamente, no solo entre los fanáticos del aire libre, pero también personas a las que les gusta al final del día, acurrucarse bien calentito en una manta (a mí esto en invierno me parece planazo 🙂
Además de la calidad de sus productos, como no podía ser de otra manera, también tienen un gran compromiso con el planeta.
Desde sus inicios, la marca ha sido pionera en el uso de materiales reciclados para fabricar sus mantas.
De hecho, las mantas originales de Rumpl están hechas con plástico reciclado, lo que significa que cada compra contribuye a reducir el impacto ambiental. Hasta la fecha, han reciclado millones de botellas plásticas para fabricar sus productos, algo que sin duda marca la diferencia.
Además, Rumpl se ha asociado con diversas organizaciones que promueven la conservación del medio ambiente, lo que reafirma su compromiso de retribuir al planeta. Para ellos, no se trata solo de crear productos para disfrutar de la naturaleza, sino de asegurarse de que esa naturaleza se preserve para las generaciones futuras.
* Rumpl