La Fundación Juegaterapia es una organización sin ánimo de lucro española que se dedica a ayudar a niños enfermos de cáncer a través del juego.
La idea surgió en 2010 cuando Mónica Esteban, la fundadora, decidió regalar una PlayStation al hijo de una amiga suya que estaba recibiendo tratamiento de quimioterapia en un hospital.
La respuesta positiva del niño, su alegría y la manera en que afrontó el tratamiento a partir de entonces, inspiraron a Mónica a iniciar la fundación.
La esencia de Juegaterapia se basa en el lema «la quimio jugando se pasa volando».
En el año 2014 Juegaterapia lanzó los Baby Pelones, unos muñecos, que se caracterizan por no tener pelo, y rinden homenaje a los niños enfermos de cáncer, mostrando uno de los signos más visibles de esta enfermedad: la pérdida del cabello.
La idea de cada muñeco es transmitir el mensaje de que, incluso sin pelo, estos niños siguen siendo hermosos y llenos de vida.
En 2021 la fundación consiguió vender más de 150.000 unidades y es uno de los juguetes más vendidos en España.